Te invito a un juego,
aprovechando que es el día del libro. Imagínate que mi cuerpo es un gran libro,
con muchas hojas y deja a tus dedos que acaricien, mimosa y muy
lentamente, sin estar pendiente del reloj, mi piel. Muy despacio, muy tenuemente, mientras no
dejas de mirarme, con ojos luminosos, con ojos cargados de deseo. Ni siquiera
hace falta que tengas puestas las gafas, para esa mirada prefiero, a mi vez,
ver tus ojos tal cual son, sin cristales por delante…
Pues acepto la invitación a jugar.
ResponderEliminarA leer y releer cada una de tus páginas, de tus frases, de tus palabras...y a pronunciarlas en voz alta,.... y volver a leer otra vez...eres una lectura que atrapa, que engancha, que envicia.
Bonita manera de celebrar el Día del Libro.